Llegó la hora de despedirme para siempre del colegio: ¡¡¡¡wiii!!!, bueno ese para siempre es hasta que algún día tenga que llevar a mis hijos a su colegio ¿no? jejeje, bueno estoy feliz, pero en este momento lo que siento se aplicaría perfectamente a esta parte de la canción de Sheryl Crowl, para ser más exacta, al coro:
“…If it makes you happy
It can't be that bad
If it makes you happy
Then why the hell are you so sad…”
It can't be that bad
If it makes you happy
Then why the hell are you so sad…”
Son sentimientos contradictorios, ya lo sé, pero es que en mi interior algo me está diciendo: “bueno oye ya ni modo ¿no? ahora ya ‘tas grande, te toca experimentar todo un mundo nuevo ajeno a lo que ya habías experimentado...” en estos momentos, además de la felicidad, estoy experimentando ese sentimiento de inseguridad, me están sacando del lugarcito en el que durante 15 años fui todos los días del año escolar, y me están poniendo en uno completamente distinto y ajeno, incluso estoy comenzando sospechar que es muy probable que el primer día de universidad llore gritando por mi mamá, justo como hice en mi primer día de clases en nido (jeje es exageración por si acaso).
Bueno casi todo el mundo dice que va extrañar a sus compañeros a los profesores y todo eso, cuando está saliendo, y la mayor parte de las despedidas dicen lo mismo: “...no los voy a olvidar, siempre serán mis amigos, gracias a todos, los voy a extrañar...” como nos dijo alguna vez Enrique Fernández en un ameno almuerzo un viernes que no recuerdo la fecha: “Pareciera que están preparando un suicidio colectivo de tantas despedidas que hacen”, a las personas se extraña pero no es nada que no se puede remediar, con tantos métodos de comunicación es casi imposible que en menos de un minuto uno no pueda estar en contacto con alguien, no me preocupo por eso, pero lo que me deja con tristeza es recordar todo ese tiempo que estuve en ese lugar, que lo conozco como la palma de mi mano, incluso mejor, porque en mi mano puedo encontrar rayitas nunca antes vistas, pero en el colegio conozco todo de pies a cabeza, y de cabeza a pies, y lo más difícil es despedirse del lugar donde la mayor parte de mis memorias están escritas ¿no?, y lo más increíble, es que hoy pasando cerca de ese lugar ya no lo sentí mío, como solía sentirlo, fue una sensación muy rara, me dejó feliz porque ya estoy avanzando y estoy con vista en el futuro, pero a la vez me dejó triste, y con sentimiento de vacío porque además de mi casa ya no tengo un lugar con el que identificarme.
Sé que es un poco egoísta decir que voy a extrañar al lugar y no a las personas, pero es que como dije anteriormente me puedo comunicar con ellas, y con el lugar, ya perdí el vinculo de referencia, ya es algo ajeno, ya no es mío.
Bueno llegó la hora, y me hace feliz salir de una vez del colegio, todavía está presente el sentimiento de tristeza, aunque es pasajero, y estoy más que segura que con la emoción de tomar un rumbo nuevo voy a perderlo en el camino.
P.D. Fue un poco sentimental el post ¿no?, espero que no se hayan cansado de leerlo, necesitaba un lugar donde poner estos pensamientos, para que no sigan rondando en mi cabeza :D, es casi como una pequeña terapia :D gracias por la comprensión :D, ahh y no supe como llamar el post, espero sugerencias ¿si?
Bueno casi todo el mundo dice que va extrañar a sus compañeros a los profesores y todo eso, cuando está saliendo, y la mayor parte de las despedidas dicen lo mismo: “...no los voy a olvidar, siempre serán mis amigos, gracias a todos, los voy a extrañar...” como nos dijo alguna vez Enrique Fernández en un ameno almuerzo un viernes que no recuerdo la fecha: “Pareciera que están preparando un suicidio colectivo de tantas despedidas que hacen”, a las personas se extraña pero no es nada que no se puede remediar, con tantos métodos de comunicación es casi imposible que en menos de un minuto uno no pueda estar en contacto con alguien, no me preocupo por eso, pero lo que me deja con tristeza es recordar todo ese tiempo que estuve en ese lugar, que lo conozco como la palma de mi mano, incluso mejor, porque en mi mano puedo encontrar rayitas nunca antes vistas, pero en el colegio conozco todo de pies a cabeza, y de cabeza a pies, y lo más difícil es despedirse del lugar donde la mayor parte de mis memorias están escritas ¿no?, y lo más increíble, es que hoy pasando cerca de ese lugar ya no lo sentí mío, como solía sentirlo, fue una sensación muy rara, me dejó feliz porque ya estoy avanzando y estoy con vista en el futuro, pero a la vez me dejó triste, y con sentimiento de vacío porque además de mi casa ya no tengo un lugar con el que identificarme.
Sé que es un poco egoísta decir que voy a extrañar al lugar y no a las personas, pero es que como dije anteriormente me puedo comunicar con ellas, y con el lugar, ya perdí el vinculo de referencia, ya es algo ajeno, ya no es mío.
Bueno llegó la hora, y me hace feliz salir de una vez del colegio, todavía está presente el sentimiento de tristeza, aunque es pasajero, y estoy más que segura que con la emoción de tomar un rumbo nuevo voy a perderlo en el camino.
P.D. Fue un poco sentimental el post ¿no?, espero que no se hayan cansado de leerlo, necesitaba un lugar donde poner estos pensamientos, para que no sigan rondando en mi cabeza :D, es casi como una pequeña terapia :D gracias por la comprensión :D, ahh y no supe como llamar el post, espero sugerencias ¿si?
